La comparsa ‘Donde Candela hubo…’ se presenta como carboneros que llevaba el picón a las casas, pero el transfondo del tipo es de aquellos comparsistas que defienden la copla clásica. Muy bonita la presentación.
Los pasodobles, el primero al Vaporcito del Puerto. Recuerdan a ‘Los hombres del mar’, que hace 50 años le cantó a este navío y que ahora se “muere” a la espera que lo reparen. Bonito el homenaje a Adriano III y a la comparsa de Paco Alba.
El segundo a la enfermedad del Alzheimer y un matrimonio que uno de ellos la sufre, y que ahí está su “media naranja” para cuidarlo.
Los cuplés, el primero a las letras de la comparsa de Los Majaras, que dicen que son todas de pena. Dice que tienen un gran disgusto, porque a Pedro le van a quitar el antifaz y le van a poner un botón de luto.
El segundo al teatro. Dicen que cuando vinieron con los Simios había dos estancos en el patio de butacas. Y en los camerinos han montado un “Mercamueble”, con todos los “cajonazos” que se ha llevado la comparsa de El Puerto.
El popurrí, de estilo clásico, para recordar a la comparsa de Los Majaras de El Puerto de Santa María en el año de su despedida.